Yo:¿Por qué te conocí si no eres para mi?
Tu: No pretendas poseer todo aquello que ha nacido para ser libre.
Yo: Te conocí y te quise, no lo sé si conmigo o para mi, o por ambos motivos.
Tu: No soy objeto, soy alma, seria inútil querer tenerme.
Yo: ¿Por qué dos seres se encuentran en el camino y sin mirarse a los ojos se han reconocido? ¿Es que no se pertenecen?
Tu: El sentido de pertenencia mata el amor, lo tortura y lo anula, lo despedaza y ahoga.
Yo: Soy yo la que ahora se ahoga, pierdo la mirada en el vacío, el vacío que un día ocupaste.
Tu: Apaga la luz, avanzada la noche está, entiende que no todas las preguntas tienen respuesta, no todos los días son soleados ni todas las noches tienen luna, ah! y también hay diálogos que simplemente no terminan…